“Mi piedra”
Mi piedra no es de piedra
es porosa, delicada
y húmeda.
Un coral fuera del mar,
color gris
que sigue vivo.
O tal vez sea de madera
de árbol noble,
de olmo seco.
Y está allí en la quietud
en medio
de la nada.
No hay más piedra
que la mía
y me esperaba.
Yo me siento en ella
cada día
y la acaricio.
¡Que lejos te has quedado
asfalto mío
qué huérfano de mí!
Me gusta recostarme en ella
y meditar
con un libro de poemas.
A veces cojo una margarita
para arrancale uno a uno
los pétalos de olvido.
A veces sólo me detengo
y miro, con mis ojos de mirar
el infinito.
El mar me está esperando,
me da cobijo
¡Tal vez se haya muerto el frío!
©AMS Cádiz
Marzo de 2011
Muy bello el poema interiorista, y muy bella la foto. Parece que uno estuviera en la piedra misma.
ResponderEliminarMe recordó un poema que le hice yo a una piedra que me encontré de madrugada en un acantilado en Portugal mientras paseaba yo sola por allí.
Abrazo. Aquí va:
DEL MAR
Lo siento. Eras preciosa y te saqué del agua.
Te libré del río aquel de agua salada.
Estás mejor conmigo,
yo dejo que descanses, ¿escuchas mi silencio?
ya no habrá más baños a deshora.
No pienses en las olas,
tienes mis manos que te mecen sin remojos.
¡Eres tan bella...! Pero…
¿por qué no brillan ya tus verdes?
se te están yendo los tonos.
Yo te cuido a mi calor,
¿qué más quieres de mi?
Te me vas entristeciendo.
Te embrujó el agua, ya lo veo.
¡Me gustas tanto...!
Pero no puedo hacerte mía.
Eres del mar, y tú no quieres evitarlo.
Hermosísimo poema Angeles: muchas gracias!!
ResponderEliminarBesos