“Días raros”

“Días raros”

Hoy cogí una margarita y pétalo tras pétalo en plan sádico hasta acabar con ella no me dijo ni si ni no la hija de puta. Claro que creo que entendió que en el fondo yo no le estaba preguntando nada. De manera que me senté en la hierba a meditar y casi me quedo frito, los niños jugando con las perras, vaya panorama, si es que la parte de atrás de mi casa es surrealista: imaginaros la foto, un tipo dormido con una muleta y dos perritas blancas sueltas. Sólo me hubiera faltado la litrona al lado, menos mal que supe salir del trance, por suerte graznaron las gaviotas, las de aquí graznan, deben estar muy enfadadas con el mundo. Los gallos cantan a deshoras y los perros ladran sin venir a qué, algunos vecinos también ladran a sus hijos pero es que encima lo hacen en alemán: oiga no me grite bastante tengo con que me hable en alemán. Al llegar a casa cogí las artes de matar y enfrentarme a un nuevo toro, el paquetito de tabaco y el mechero, un tececito que está de muerte porque lo compro en una tienda inglesa, el folio en blanco y mi boli bic, que me costó una pasta. El papel pedía a gritos que le arañara con algo nuevo, pero ná de ná que no me salía nada, de manera que me puse a hacer una regresión hipnótica, recorrí mi infancia que no tiene recuerdos de ningún huerto donde madurara un limonero, más bien una parra que hubo que cortar porque nos levantaba el suelo. Qué feliz era yo de chico, iba a mi aire, como ahora, me inventaba personajes y jugaba con ellos, luego ya crecí, no mucho y encontré personajes de verdad, tampoco gané mucho en el cambio la verdad. He conocido a mucha gente en mi vida, mucha y ahora mira tan a gustito solo y a solas con mi corazón, ni siquiera vivo enamorado y desde luego ni hago el amor ni follo, joder estoy hoy de un lírico que asusta, no solo de versos vive el hombre, al menos este hombre. Yo sé que esto no es publicable pero lo voy a publicar, así con dos cojones, al fin y al cabo el blog es mío no, lo malo es que igual me quedo sin lectores, pero en fin, viva la libertad creativa, creo que hay quien sabe leer entre líneas. Quisiera escribir los versos más hermosos esta noche, claro nos ha jodido y cualquiera a eso nos dedicamos no? Pero nada que hoy no es el día, tá la cosa mu mala, los versos se escapan por la ventana, si por esa por la que entran las moscas. Qué pesas son las moscas de aquí quilla, es que te buscan y te buscan y hasta muerden. Mis perras y yo nos dedicamos a cazarlas pero no hay manera vuelan bien, se van un rato y luego vuelven, me voy a comprar un flus-flus de esos buenos, ya verás, en cuanto pueda andar me acerco al mercadona y pido el mejor del mercado, o si no lo hago yo con amoníaco en rama y lo meto en un frasco de misterproperahorasellamadonlimpio. Luego pa más inri me suena el móvil con número desconocido y me dice un tipo llamo para hincharte las pelotas, le mandado cerca, ya sabéis, seguro que estaba mamao o es que a lo mejor era tartaja, o las dos cosas, nunca podemos descartar nada. La noche se me antoja un tanto loca, no sé si estudiar o ponerme a ver algún canal porno, creo que me convendría más lo primero, pero uno no siempre hace lo que debe, y yo he perdido el manual de andar los días, además pa qué no hay nada más aburrido que ver el metesaca ese maquinal y zafio que parece excitar a algunos hombres, nunca conocí a una mujer que disfrutara con una peli porno. Ya está otra vez la mosca cojonera, si es que me tiene ojeriza, se le nota en la mirada. Qué es lo que quieres que me vaya, pues lo llevas clarinete, de eso nada, yo estoy aquí mu agustito que se vaya ella si quiere, no hay divorcios que valgan, aquí mando yo, como está mandao. ¿Por cierto esto que escribo y paso a publicar se puede considerar prosa poética? Es que tengo serias dudas estilísticas, bueno y de las otras, pero ese es otro cantar. Mira el papel, ahora rendido ante mi boli bic, no querías que te arañara, pues ea ahí lo llevas que soy de Vallekas, vamos me van a venir a mí con tonterías.

No, no me he vuelto loco, estaros tranquilos y tranquilas, sobre todo tranquilas, sé lo que hago y lo que escribo y ya tenía yo ganas de mearme un día fuera del tiesto. Bueno ya me pongo serio, lo que os decía, que hay días raros, raros, raros y este parece haber sido uno de ellos, y esta la florida crónica del día. Ser felices y buscar la belleza, la única quimera que sigue mereciendo la pena en este dudoso mundo. Siempre un placer contar con ustedes, ya saben donde me tienen y donde pueden encontrar mi incuestionable literatura. Me voy con la música a otra parte, como no tengo vecinos puedo tocar a cualquier hora y así de paso le quito el polvo a las teclas del piano, más me valdría ponerme a limpiar la cocina, coño pero es que no son horas, me voy a dar otro chute de té y fumarme un cigarrito, si no me equivoco me toca estudiar algún trastorno psicopatológico, no sé cual escoger, me inspiraré en Rajoy a ver si doy con el diagnóstico adecuado. Pues eso que me voy, mañana más y si puede ser mejor, no todos los días son fiesta: mañana me voy a comer unas lentejas ¿qué os parece? Ya me contaréis. Chao, bye, arrivederchi, adeu, hasta mañana que durmáis como merecéis y soñéis con lo más hermoso que encontréis en el camino. Besos y abrazos.

©AMS Cádiz

Junio del 2011