“Tormenta de poniente”
Nubes de otoño que azulean de gris este cielo traslúcido y este sol rebelde e incandescente que se resiste a perderse tras el horizonte de marismas, mar y ventanas de par en par. Tormenta de atardecer que amenaza con mojar de dulces lágrimas de lluvia el incansable ir y venir de las olas y las emociones y la quietud serena de la arena de la playa y los recuerdos. No pienso amurallarme tras los cristales, sino empaparme de la húmeda frescura de la noche que ya llega. ¡Ya la espero, como se espera a una nueva amante, a un nuevo amor! Noche andaluza y gaditana, universal e íntima, que me envuelve con renovado compás día tras día, y me baila zambras, y me da palmas por bulerías, y me susurra versos y palabras, ora por soleá ora por alegrías. Noche que me mece y me columpia, que me danza el alma y que me arropa con estrellas nuevas los sentidos. Noche que se anuncia en Si bemol y Fa menor: las guitarras duermen, el piano calla. Melodías en blanco y negro y acordes de arco iris mudos que dejó morir la tarde. No es nostalgia lo que siento, no, ni mucho menos añoranza, sino el saberme a solas perfumado de evanescente melancolía, tan cerquita de mi corazón y tan lejitos de sus ojos, los de Ella. Encoñado como un perro con la Luna Nueva, embriagado cual borracho por la brisa y el silencio y enganchado como un yonqui a la poesía, vuestra poesía. Entregado, enloquecido, dulcemente enamorado y eternamente agradecido a esta puta vida.
© AMS Cádiz
Octubre del 2011
muy bonito, con muchas imágenes, me gusta mucho...
ResponderEliminarQué noche tan bonita. Dan ganas de pedir que no amanezca. Besos.
ResponderEliminarQue paren al mundo en esos instantes, que el viaje se detenga y lleguen los sueños con sus minutos eternos,... Saludos Dorchy :)
ResponderEliminar¡Toma! esto sí es sacarle partido a la vida (perdón, a la puta vida. Besos
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