"vagabundo"

 Ulises

Zambra

Mis nuevos seguidores en internet, como son perritos no les dejan tener cuenta de gmail. Feliz díapleno de luz y amor.  Amador

“Vagabundo”

- Papá, dijo la niña, ¿se dice vagabundo o vagamundo?

- Vagabundo hija, dijo el padre.

- Pero por qué, no es acaso un vagabundo un hombre que anda por el mundo.

- Sí hija, pero se dice vagabundo.

- Pues no lo entiendo dijo la niña guapa que desayunaba al lado.

Y se quedó pensando…

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Voy por la ciudad a saltitos

de mirada en mirada.

Huele a membrillos y a jazmín,

a ropa limpia y agua salada.

Me detengo en los umbrales y en las esquinas

no tengo prisa, ni siquiera por encontrarte.

Puedo oler tu perfume y tu piel

casi desde cualquier sitio, 

estás aquí aunque no estés,

te siento y te presiento.

Acabo de tropezar con un recuerdo en plena calle.

¿y ahora qué hago yo?

Bueno, creo que no me ha visto nadie.

Sigo y prosigo mi camino así a mi aire,

aunque bien mirado no sé ni adónde voy.

Bueno, la cosa es que yo sigo.

Ahora noto que me miran a mi espalda,

no sé si girarme.

¿y si eres tú la que me mira?

¿Qué te digo yo, donde me meto?

Tú siempre sabes dondes vas yo ni me entero.

Bueno, con dos cojones, me doy la vuelta y miro.

No eres tú, menudo alivio, vaya susto me habías dado.

Ando asustadizo últimamente debe ser el Levante,

ya sabes, todavía no me he acostumbrado.

Me pregunta una señora que sí sé dónde está el cielo.

Y yo le digo pues verá yo creo que allá arriba y es de color azul.

Y dice, persistente, no, pero el cielo, cielo.

¿ése al que van los buenos le digo yo?

Dice sí, caballero sí, precisamente ése.

Y le digo que no lo sé que acabo de llegar a esta ciudad.

Y me dice, no, si se le nota, parece usted un poco despistado.

Lo estoy señora, yo también busco mi cielo, pero aún no lo he encontrado.

Pues que tenga suerte amigo y siga y prosiga su camino.

Así lo haré señora que tenga un buen día.

Condiós, me dice ella, y condiós me quedo.

Ahora me suena el móvil ¿y qué te digo yo?

Ah, menos mal que no eres tú y como no conozco el número ni lo cojo.

¿y si te llamo?

Bueno no, mejor lo pienso un rato.

El reloj de la estación marca las cuatro y diez.

El mío al parecer está parado.

© AMS Cádiz 2012

Ya no tengo a Ritmo y mi niña que aparece en el video se me muere con solo 35 años, aun siendo neuróloga: se cumplió la profecía cuando mi hermano me deseo todos los males del mundo, te podrás sentir orgulloso muchacho, pero a mi no me va a detener sino la muerte: perdonen la melancolía y el tono. Besos. Amador